Dentro de nada es el día de los enamorados, y qué hay mejor que regalar algo hecho por nosotros mismos, con todo nuestro cariño. Por ejemplo, desde hace varios años cada San Valentín preparo una tarjeta para mi abuela, y como no sabe leer suelo ponerle fotos nuestras y un corto texto que le leo cuando se la doy. Y lo mismo suelo hacer por Navidad, cumpleaños...
Por eso,ahora que se acerca San Valentín, me he decidido a enseñaros las galletas que preparé para los niños de mi clase de prácticas el año pasado como detalle del día de los enamorados.
Por eso,ahora que se acerca San Valentín, me he decidido a enseñaros las galletas que preparé para los niños de mi clase de prácticas el año pasado como detalle del día de los enamorados.
Las galletas son de vainilla, y después están decoradas con glasa. Al día siguiente de prepararlas (cuando por fin estaban secas) las envolví de forma individual con celofán decorado y un trocito de cinta. De está forma tan sencilla podemos tener un detalle bonito y económico. Cuando mis niños las vieron se alegraron un montón, ¡la mitad de las galletas no llegaron a la puerta de la salida!
El resultado fueron 28 galletas con forma de corazón para los niños y una para la maestra, y con la masa sobrante hice estas que podéis ver más abajo para mis sobrinitas.
Para se la segunda vez que decoraba con glasa quedaron bastante bien, aunque el pulso no me llegaba para hacerles la cara!
¿Alguna vez habéis regalado galletas?
¿En qué ocasiones soléis hacerlo?
Me gusta la idea, me la apunto! Un saludo.
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